Título original: Morte a Venezia
Director: Luchino Visconti
País: Italia
Año: 1971
Idioma: Italiano, inglés, polaco.
Reparto: Dirk Bogarde, Björn Andrésen.
Mientras escribo estas líneas, debo admitir que sigo en un cierto shock emocional tras haber visto la película de Visconti, en donde el cine deja de ser el simple relato de algo que ocurre y se vuelve arte. Una excelsa pieza de arte.
Visconti lleva a la pantalla su interpretación de Muerte en Venencia, la novela de Mann que hace poco reseñe.Sin duda, su visión es diferente pero no desmerece para nada a la novela corta de Mann.
Visconti puede hacer de la película algo conmovedor, sin necesidad del sentimentalismo, guiándonos sólo con la impecable técnica de la cinematografía y el agazajo visual que es Muerte en Venencia.
Aquí, Gustav von Ashenbach es un compisitor de piano que decide viajar a Venecia escapando de un pasado o una rutina, lo cual sólo podremos interpretar por ciertos flashbacks que Visconti itercala en la narración. Nada excepcional ocurre, hasta que Gustav se topa con Tadzio, un adolescente que desde el primer momento le cuativa y provoca en él un arranque de deseo que, pese a sus intenciones de ignorar, lo rebasaron y lo harán caer en una espiral hacia lo prohibido.
Tadzio, increíblemente interpretado por la precoz belleza de Björn Andrésen, es aquí una representación del pecado, del mal, de la tentación. Podría decirse que él sabe lo que provoca en Gustav, y a partir de ahí, lo manejará a su antojo, le haré suplicar por tan solo una mirada o una sonrisa.
La complejidad de los personajes se complementa de forma maravillosa, haciendo un drama psicológico a través de acciones e imágenes, siendo poesía llevada a la pantalla.
Es aquí interesante intentar cuestionarnos todo lo que Tadzio representa para Gustav: la belleza, claramente, una imagen casi divina; la juventud perdida y con eso, una felicidad también existan hace tiempo para Gustav. Una esperanza que sin embargo, lo sume en la más grande las angustias. ¿Una segunda oportunidad? ¿Un recuerdo de mejores tiempos? Una pasión tardía, un amor imposible, una musa por la que vale la pena morir...
Gustav, observado a Tadzio con fascinación |
Callar y desear es el castigo más grande que nos podemos echar encima. |
Mucha de la fuerza de la película recae en la impecable actuación de Dirk Bogarde, quién interpreta a Ashenbach. Cada gesto, movimiento, por pequeño e imperceptible que parezca, en realidad dotan de gran sentido cada escena.
Precisamente, al lograr transmitir la marea de sentimientos que lo aflige, con el maravilloso final de la obra, uno no puede evitar soltar lágrima. Al menos mi maestra de apreciación cinematográfica y yo lo hemos hecho. ¡Simplemente perfecta! La mayor expresión de cine como arte.
Pueden ver la película aquí, aunque sólo con subtítulos en inglés. Si le entienden, les recomiendo muchísimo que la vean:
parece super interesante! :D
ResponderEliminarLa película es maravillosa, necesaria, obligatoria... Una película de director, sin duda alguna. Y no sé porqué, me he acordado de "Ojos negros" ¿la has visto?
ResponderEliminarBesos
Ah, esta película aún la tengo pendiente de ver, pero con las cosas tan bonitas que has dicho, y esa preciosidad de imágenes que has puesto, ya me están entrando ganas de verla.
ResponderEliminarMe guardo el enlace de Youtube que has dejado :-D.
Mmm jobar, por tu culpa me han entrado ganas de ver la película...
ResponderEliminarLa veré en cuanto tenga un ratín...
Un besote grande!^^
La verdad es que no me llama mucho la atención pero si tengo la oportunidad creo que la veré ^^ (aunque sea solo por curiosidad)
ResponderEliminarBss!!!:D
vaya sombreros...
ResponderEliminarOh por dios, tengo que verla *-* pero antes leere el libro:3
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